Pasa el dìa por mi jardín
-hojas muertas capullos apenas discernibles-
inhalando el hálito que la tierra exhuma,
los últimos estertores del invierno,
la ùltima eyaculaciòn del rey
de las manos frìas,
exhalando el ardor de los vientos del sur
esos que incitan la danza
del apareamiento.
A la
pausa me entrego,
a esa melodía
en su centro.
Sandra Collazos McPherson
Dallas, TX, March 25, 2015