Ritual del 21 de Diciembre 2013
No hay nada permanente . Todo cambia.
Todo se transforma, se altera, se mueve de lugar, pasa, llega, se
va, se atrasa, se adelanta. No hay absolutamente nada que permanezca
inalterable o quieto en este mundo material. A nivel molecular, los átomos, en su perpetuo
movimiento, son los causantes de abrir el compás de la vida, son los verdaderos
arquitectos de esto que llamamos realidad. Si los átomos detuviesen su movimiento aunque
fuera por un segundo, el universo entero
colapsaría, desaparecería.
El universo es una configuración absolutamente ordenada y sigue un proceso de cambio evolutivo e inalterable, una transformación vital a nivel de conciencia y a nivel energético, un proceso que va de lo grande a lo infinitamente pequeño y que nos incluye a todos por igual.
En
este supremo orden cada cosa ocupa su lugar en el tiempo y el
espacio. Ni un milímetro más acá o un segundo más allá.
La paradoja que nos confunde es la idea de que
vivimos en un mundo caótico, un mundo lleno de confusión, en donde el
movimiento es caprichoso y nosotros, aparentemente
no tenemos ningún control sobre los acontecimientos que suceden en nuestra vida
a nivel personal.
Lo
que sucede es que hemos perdido la habilidad de poder percatarnos de este orden
que está presente en cada momento de
nuestras vidas. Lo hemos transmutado por
la extraña habilidad de convertirlo todo
en un rompecabezas, a veces indescifrable.
Pero,
no todo está perdido.
La Tabla Esmeralda, atribuida al gran Hermes
Trismegistos nos dice: “Como es arriba, es abajo”.
Con
ese espíritu en mente, el hombre ha dirigido
su mirada hacia el firmamento desde tiempos inmemoriales, para estudiar y
analizar el movimiento de planetas y constelaciones, configuraciones que reflejan el movimiento a nivel molecular dentro de los centros
energéticos o chakras del ser humano. Su
única finalidad habría sido la de utilizar ese conocimiento para entender el orden que
impera en el universo y del cual él también forma parte y así poder elevarse
por encima del caos.
El
solsticio de invierno como simbolismo, nos
llega al final de la noche más larga. Es
la representación de esa oscuridad que
nos envuelve y que nos hace ver las cosas a través de su oscuro cristal. Luego, el sol, que da la apariencia de estar
detenido en el cielo por tres días, emprende su camino de regreso,
trayendo la tan necesitada luz, el calor
tan apreciado en estos fríos días invernales.
En este momento se abre una puerta por donde ha de entrar un torrente de energía y es el que nos disponemos a recibir y a
utilizar para darnos la oportunidad de recuperar un poco esa habilidad de
videntes de poder ver el bien que nos rodea, y también la habilidad de deshacernos de viejos esquemas que ya no
tienen cabida en nuestras vidas y que impiden que podamos hacer realidad los
deseos de nuestro corazón.
El
sol, tal como el átomo primordial dentro de nuestro corazón, se alinean en este día, se vuelven aliados, renacen en
una incandescencia revitalizadora y nos recuerdan que son una sola cosa, una
sola entidad, y que en este sitio en donde habitan mancomunadamente, aquí no hay oscuridad ni caos, solo un brillo inefable, como un recién nacido en un pesebre humilde,
como el preciado orden que impera absoluto en el Universo, nuestro Universo.
2014
El
año 2014 es un año totalmente mágico.
Veremos en acción energías nunca antes vistas, prodigios, tanto en el cielo como en la tierra. A medida que nos adentramos en el
nuevo ciclo de el hombre del
cántaro, la humanidad como un todo, comienza
su proceso de unificación de una manera mucho más efectiva, dejando a un lado
lo rígido, lo opresivo, todo lo que excluye,
y atrayendo hacia sí, como instrumento de construcción de los nuevos
caminos fluviales, a el arte en toda su
gama de expresiones.
Por
otro lado, las energías del año que se aproxima, de acuerdo a la configuración astrológica en
el cielo, están destinadas a abrirte las puertas para ese sueño que, a pesar de
tus esfuerzos, todavía no se ha hecho realidad.
Estas energías van a despertar el exacto conocimiento de la fuerza que se
te opone para que puedas transmutarla.
Ritual
Los
rituales del 21 de Diciembre son rituales de Luz, fuego y calor, todos símbolos
del Sol, que a su vez es el símbolo por excelencia del Espíritu.
Los
rituales están compuestos de varios pasos.
1.-
Deshacer la negatividad del año corriente mediante el fuego.
2.-
Meditación-visualización guiada. Esto
tiene por objetivo pasar más allá de la mente consciente hacia el
subconsciente, que lo entiende todo a través
de la simbología.
3.- Oración
de recibimiento y agradecimiento de la Luz.
4.-
Comunión.
Materiales a Utilizar este año 2013
Incienso
Una
vela roja
Una
vela blanca para cada participante
Un
bol con agua para colocar la vela roja
Una
cucharada de sal
Una tarjeta en blanco y pluma para escribir
Una
botella de vino tinto
Una
hogaza de pan
Una
campana o un vaso de vidrio y una
cuchara para hacerlo sonar cuando llegue el momento.
Una moneda o un billete para cada uno de los
participantes. Este billete se
guarda en la caja y es nuestro imán
para que no nos falte dinero en el año que viene
Instrucciones:
Primer paso:
1.-Acomodar
la mesa colocando la vela roja en el
centro del bol con agua al que se le
habrá añadido una cucharada de sal,
2.-Escribir lo
negativo en papelitos fáciles de quemar. Escribir lo que se desea
lograr y colocarlo en una cajita. Aparte se escribe un deseo para el
mundo o nuestros semejantes.
3.- Prender una pequeña fogata afuera de la casa o
prender una vela para quemar lo negativo. Cada persona quema sus
papelitos, uno por uno a la vez que va diciendo:
“Al fuego purificador te entrego, ya he aprendido la lección que viniste a enseñarme,
vete y no vuelvas mas a mi vida”.
Cuando el papelito
se queme se dice:
“Ahora te
reemplazo con lo siguiente: en este momento se piensa en la situación
ideal que reemplazará la situación negativa que nos estaba afectando”.
4.-Cuando todos hayan quemado sus papeles, entran en la
casa, se prende el incienso, se prende la vela roja solamente
5.- Cada quien prende su vela de la vela roja y se colocan
alrededor de la mesa, o donde decidan sentarse.
Cada quien coloca enfrente su billete o moneda, su cajita y su tarjeta en blanco.
6.- Uno por uno, cada quien va a decir, cuando le llegue su turno:
Este año que se acaba
ha sido para mí: (aquí cada quien
expresa lo que el año ha significado para él) A continuación dirá: Te doy las gracias por las bendiciones y lecciones que has traído a mi vida,
ellas me han hecho una mejor persona hoy. Ahora apaga su vela y se
mantiene en actitud meditativa en silencio.
7.-Al final solo estará la vela roja encendida.
El que dirige la
ceremonia ahora dice:
Demos gracias a
Dios por todas las bendiciones y experiencias
que este año nos ha traído. Ahora le dejamos ir en paz.
Apagar la vela
roja.
Ahora estaremos en
la oscuridad. Nos tomaremos de la mano para sentir la conexión que nos une con
la vida y el año que se acaba.
Ahora alguien debe
sonar la campana.
Segundo Paso
Alguien debe leer los próximos versículos de la Biblia:
Y dijo Dios: «Haya lumbreras en la expansión de los
cielos para separar el día de la noche, y sirvan de señales para las estaciones,
para días y años, y sean lumbreras en la
expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra ", y fue así. E hizo
Dios las dos grandes lumbreras, la lumbrera mayor para regir el día, y la
lumbrera menor para regir la noche; hizo también las estrellas. Y Dios las puso en la expansión de los cielos
para alumbrar sobre la tierra, y para señorear en el día y la noche, y para
separar la luz de las tinieblas, y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde y la
mañana el día cuarto.
Tercer
Paso
VISUALIZACION: Meditación
Guiada.
Cierra los
ojos.
Respira profundo y
lentamente. (pausa)
Deja salir el aire
lentamente. (pausa)
Respira profundo y
lentamente. (pausa)
Deja salir el aire
lentamente. (pausa)
Respira profundo y
lentamente. (pausa)
Deja salir el aire lentamente.
(pausa)
Respira profundo y
lentamente. (pausa)
Deja salir el aire
lentamente. (pausa)
Respira profundo y
lentamente. (pausa)
Deja salir el aire
lentamente. (pausa)
Siga respirando
lentamente, al mismo ritmo (pausa)
Relaja todo el cuerpo,
(pausa) siente como el peso te
abandona, (pausa) te sientes muy liviano, muy liviano, (pausa) liviano como una pluma flotando en el espacio, (pausa) tu cuerpo flota con abandono en el espacio, (pausa) liviano, (pausa)
Ahora voy a contar hasta tres y cuando llegue a tres
vas a entrar en un estado de profunda relajación.
uno
dos
tres
Mira a tu alrededor.
Estas en un claro del bosque.
Frente a ti está la estrecha
entrada a una cueva. Te inclinas un poco para poder pasar por la
angosta hendidura. Estas en un pequeño y
oscuro recinto cavado en la piedra. La
poca luz de una lámpara de aceite colocada en un nicho,
apenas permite adivinar los extraños
símbolos y pinturas que adornan las paredes.
Hacia el fondo de la cueva hay un pasadizo. Tomas la lámpara y te diriges a él. Das unos cuantos pasos hacia la oscuridad y
te encuentras con una escalera en espiral que se dirige a las profundidades.
Comienzas a descender con cuidado, poco a poco.
A medida que avanzas, comienzas a notar un rumor como de aguas en
movimiento. Sigues descendiendo. De las
paredes del pasadizo se desprende un calor, como si estuvieras dentro de una
entidad viviente.
El sonido monótono de un tambor se deja oír en la
distancia. Sigues descendiendo. Finalmente llegas a un amplio salón de
paredes rojizas iluminado con antorchas.
En el centro hay una figura encapuchada sentada frente a una mesa. Con una mano delgada te indica que te
aproximes. Te acercas un poco
temeroso. Hay algo profundamente inquietante
en esta figura oscura. Estas frente a
él. La comunicación se efectúa a un
nivel mental. Ahora entiendes que estás
en una prisión, frente a su carcelero y tu misión es la de liberar el genio encarcelado.
El carcelero te señala tres grandes llaves doradas colocadas en la
mesa . Escoge una de ellas.
Detrás del carcelero hay tres puertas. La posición de
las llaves concuerda con la posición de las puertas. La llave de la derecha abre la puertas de la
derecha y así, sucesivamente.
Dirígete hacia
tu puerta y ábrela. Te vas a
encontrar en una habitación alumbrada por las llamas de una gran chimenea de piedra. Al fondo de la habitación hay una puertas cerrada. En una esquina, cerca a la puerta hay una mesa con una gran jaula dorada. Dentro de la jaula, una hermosa ave de
brillante y colorido plumaje canta una canción que te oprime el corazón por su
tristeza.
En el centro de la habitación hay una mesa redonda con
un mantel de terciopelo rojo.
Te diriges hacia ella. Encima del mantel hay colocados varios
objetos. Obsérvalos con detenimiento. Toma tu tiempo. Son los símbolos de todo lo que te tiene
restringido. Toma tu tarjeta y tu pluma
y escribe todo lo que veas en la mesa.
Luego que hayas escrito todo, toma todos los objetos y tíralos uno por uno en las llamas que arden en la chimenea. Cuando se hayan consumido en su totalidad,
dirígete a la puerta y ábrela de par en
par. Afuera hay pequeño balcón que da hacia unos hermosos
jardines. El sol comienza a subir detrás
de las distantes montañas. Vuelve a la habitación, abre la jaula dorada, toma
el ave en tus manos y vuelve con ella hacia el balcón. Extiende tus brazos y lanza el ave hacia su
libertad. Obsérvalo remontar el vuelo hacia la
hermosa luminosidad del día que amanece.
Vuelve a la habitación. Abre la puerta que da hacia el salón rojizo. Cuando sales, con admiración, te das cuenta que el rojizo salón
ha desaparecido, para dar paso a un moderno
bar en un lujoso hotel . Notas
el elevador y te diriges a él.
Entras, cierras la puerta y marcas
S de salida.
El elevador se pone en movimiento.
Ahora voy a contar hasta tres y cuando llegue a tres vas a volver a tu realidad, vas a sentir tu cuerpo y vas a
abrir los ojos, sintiéndote muy relajado y
alerta.
uno
dos
tres
Nota: en cuanto termines la visualización, anotar
todos los artículos que se encontraban en la mesa, para que no se te vayan a
olvidar. Meditar sobre estos artículos,
pues son el indicativo de las cosas que necesitas arreglar en tu vida, para que puedas orientarte mejor en
la consecución de tus deseos.
Recomiendo que continuen practicando la meditacion, hasta que lleguen a el punto de poder visualizer los objetos con absoluta claridad. Luego, mediten sobre estos objetos, para que ellos abran su significado.
Recomiendo que continuen practicando la meditacion, hasta que lleguen a el punto de poder visualizer los objetos con absoluta claridad. Luego, mediten sobre estos objetos, para que ellos abran su significado.
Cuarto
Paso
El que guía la reunión toca
la campanita y dice:
En verdad, en verdad, pasamos por la vida sin notar
las grandes bendiciones que Dios nos otorga diariamente. Mas hoy nuestros ojos
han sido abiertos y por eso Alabamos a Dios desde lo más profundo de nuestro
ser, le agradecemos sus múltiples bendiciones, en especial este nuevo año, esta
nueva cosecha, donde veremos culminados muchos de nuestros deseos. El tiempo de
la cosecha ha llegado. Alabado sea el Dios que habita dentro de nosotros.
Todos repiten: Amen
Quinto
Paso
ENCIENDE LA VELA ROJA Y toca la campana cada vez que
cada uno va encendiendo su vela en el fuego de la vela roja .
Todos repiten:
El espíritu de la Navidad ha llegado y hoy llena de
alegría nuestros corazones.
Bendita sea esta luz que Dios nos envía hoy y que
viene a llenar mi vida con la abundancia y el amor divino. En este día yo le
agradezco a Dios de antemano por abrirme las puertas de la prosperidad y la
abundancia del Universo y por concederme bajo la gracia y de manera perfecta
todas las peticiones que contienen mi cajita. Especialmente le pido lo
siguiente: (aquí va a leer en voz alta la petición que tiene escrita para el
mundo o para su comunidad, etc. )
Ahora que todos tienen sus velas encendidas y han
leído sus peticiones globales, el que dirige la ceremonia dice lo siguiente:
Yo soy el Hijo de Dios, creado a su Imagen y
Semejanza. Para mí fueron creados los cielos y la tierra. Por derecho divino me
pertenecen todos los tesoros del Universo.
Dios me ama y solo quiere lo mejor para mi, por lo
tanto yo soy merecedor de toda la prosperidad y abundancia del Universo, la
cual llega a mis manos en la medida en que estoy dispuesto a disfrutarla. Hoy
he abierto una de las muchas puertas de la prosperidad dentro de mí y hoy me
hago merecedor de recibir todo este caudal de energía que me impulsara al sitio
donde verdaderamente debo estar. Hoy todo obstáculo mental que me he creado y
el cual estaba impidiendo que la abundancia de Dios llegara a mi vida ha sido
destruido. Hoy soy una persona renovada en este rayo de energía. Hoy he
recibido un regalo que me ayudará a descubrirme a mí misma, a abrir mi alma a
las verdades del Ser. Bajo la gracia, de manera perfecta. Gracias Padre, por tus
infinitas bondades. Amen
Ahora pueden abrir la botella de vino y hacer un
brindis y comer de la hogaza de pan.
Feliz Navidad y un Próspero y Venturoso Año Nuevo.
La Canelo
Dallas, TX
12.18.13