Wednesday, October 2, 2013

Poema No. 148

 
 
 
 
 
Casa limpia,  dormida
habitante impecable, despierto
sombras adustas, imborrables
sueños  tranquilos, inquietudes
cielo transustanciado, líquido
velo del mar, Caín sujeto al credo
puerta sin marco, luz inquieta
mano que escribe, letra que se asoma
tras la ventana absurda de las sinrazones
página tras página, libro en blanco
calles y callejas, corredores
pies cansados, pies eternos, pies que huyen
la vorágine del escapismo
faroles extinguidos, cavernas
fosos y fosas sepulcrales
viento del mar, Abel y el fruto
grillos alucinados, suelos adormecidos
viento del sur, el vigilante asoma
toma en su cuenco el verde bilis del tormento
ciencia del mal, Flores
fascinación, cruz del mediodía
rojo naranja dulce agria
boca embriagada, aquí viene la espada
a traspasar el quicio de la puerta
parte las aguas, se aglomeran
en globos de efímera quimera
viento del este, cosas a la ligera
cáustica lluvia, la gente se adormece
se levanta la duda, caen las consistencias
suben las meretrices, del palio son las dueñas
beso de Judas, vórtices concatenados
rayos, truenos, centellas y relámpagos
la paridad ausente se revela
es causa de ceguera
es causa de ceguera
niebla, frío, angustia
soledad, ausencia
el majestuoso río las aguas negras
aguas azules, aguas de la omnisciencia
ser oscuro, iluminado
conspicuo, ignorante, obsceno, santo
todo menos uno igual a cero
condenado
paria, arcángel, el árbol
la simiente
la consuetudinaria relatividad del ser viviente
viento magro, viento redivivo
vienes  y vas, vas y vienes
antes de ti, todo era correlativo a nada
después de ti, nada será correlativo a todo
viento solo, viento solitario
viento único, Soplo, hálito
guardián de la existencia
mano que se eleva, cama suave
la impasibilidad del tiempo
las horas crasas creación procrastinada
la insoportable vaciedad de la nada
todo se va volviendo hacia sí mismo
hombre, lobo, paja, piedra, ninfa
hombre, luna, fuego, casa fina
casa  desnuda, casa limpia
habitante impecable
dormido
sueña.
 
Poema de La Canelo
Dallas, TX October 2, 2013

 
 
 



Poema No. 29



 

 
Cierro mis ojos
y a tí me acerco
suavemente.
 
Entrelazo tu cuerpo con mis manos
y con mis pies también
confiadamente.
 
Siento tu cuerpo tibio
y tu aliento acompasado
y arrullo entre mis brazos
tu inocencia
de niño acurrucado.
 
Es tal la complacencia
de sentir tu cuerpo
junto al mío
que casi se convierte
en reverencia
y a la vez en pecado
pues mis caricias maternales
despiertan la vehemencia
de los instintos naturales.
 
En un instante
tu aliento acelerado
se mezcla con mi aliento entrecortado
acariciante
me empujas sin violencia
hacia el umbral desesperado
de la demencia
y así, con manos y pies entrelazados
cruzamos mas allá
de la conciencia
al otro lado.
 
Es tan hermosa esta experiencia! 
 
Tu aliento
se vuelve acompasado
de nuevo te acurrucas
como un niño
yo siento la urgencia
de volver a arrullarte
tiernamente
cierro mis ojos
y a tí me acerco
nuevamente.
 
 
Poema de La Canelo
Dallas, TX October 2, 2013