Wednesday, August 7, 2013

Poema No. 180




Una noche cualquiera
una de esas noches en que las voces parecen acallarse
Y en el reloj las horas parecen detenerse
 me vi súbitamente  transportado en un rayo de luz iridiscente
a las fronteras más lejanas de mi mente. 
 
Enceguecido
 perdí control de todos mis sentidos
y lo que en  un momento una persona fuera 
se convirtió en un ser desconocido
que me miraba sin ojos y me hablaba
desde el fondo de un pozo interminable
palabras sin sonido
 incandescentes
como hierro forjado al rojo vivo 
 
Yo no se
si todavía yo era yo o simplemente
ya había perdido identidad o si mi mente
 deseosa
de jugar al gato y al ratón me amedrentaba
con una irónica charada, mezcla del sí del no de lo posible
yo solo sé que  un algo adentro mío tornábase irascible
mientras que en otro lado del ese desconocido territorio, el otro yo se deshacía
en llanto silencioso, en tímido desvelo, en tierno sufrimiento
hasta que no hubo parte que yo reconociera como mía
si es que alguna vez yo hubiera pretendido
reconocer un algo tan irreconocible
como la vastedad que diariamente suele manifestarse
en nombre mío, aún sin mi permiso
yo solo sé que nada yo sabía
hasta que un estallido en el centro de mi esfera
en mil pedazos resquebrajó la vana incertidumbre
del ser  no-ser del ente dividido
y solo me quedé
en medio de un silencio tan profundo
en medio de una oscuridad apabullante
mas
 solo son palabras las que escribo
no tienen validez
 no tienen crédito
mas  así fue que  comencé de nuevo
a recrear este universo diariamente
los mismos paisajes
 los mismos personajes
porqué cambiar un algo tan
perfecto?
 
 
Poema de Sandra Collazos McPherson
Dallas, TX August 7, 2013