Thursday, August 8, 2013

Poema No. 127


 

 

Que sombríos
los árboles antiguos
su sombra somnolienta
seduce al caminante
y al doblar una esquina
tan vieja como el tiempo
nos contemplan esos rostros
viejos, desconocidos casi
de tanto tiempo en el olvido
rostros marchitos, miradas implacables
ceños adustos, casi acusatorios
te miran a lo lejos, tras esa esquina
olvidada del tiempo, pidiendo
reconocimiento, una señal augusta
el esbozo de una sonrisa
o, al menos, la transitoriedad
de un pequeño recuerdo
que  se nos haya quedado pegado
a la pared resbaladiza de la memoria
quién eres? qué quieres? qué vienes
a buscar?
no tengo nada que darte
ni siquiera te reconozco
eres un fantasma y otro y otro
ya te olvidé, no pude evitarlo
porqué vuelves si solo eres una sombra?
Pero, allí estás
y no tengo más remedio
que hurgar en los bolsillos de mi traje raído
por un mendrugo de pan
con qué alimentar tu boca hambrienta
no
no tengo nada que darte
lo lamento
tendrás que volver con los otros
fantasmas
aquellos que vagan a la sombra
de los árboles antiguos
 
Aún estas allí?
 
Me pregunto:  será que la existencia
es solo una continuidad de fotos amarillentas
que van y vienen
al vaivén de los deseos escondidos
las esperanzas dormidas, los sueños congelados
las ansias reprimidas
galería de retratos fantasmales, con sus sonrisas trashumantes
que vienen a recordarte que pronto serás otro retrato más
pegado a la pared de la memoria de quien sabe quien
otro retrato mendigando por reconocimiento
aunque sea la transitoriedad
de un pequeño recuerdo
otra sombra mas
tras esa esquina
olvidada del tiempo?
 
Acércate
ya me acuerdo de tí.
 
 
Poema de Sandra Collazos McPherson
Dallas, TX August 8, 2013