Ritual del 21 de Diciembre 2015
Como ya es de su conocimiento, el proceso a seguir a la hora de construir el ritual consta de dos
facetas. La primera es verificar las
influencias planetarias en el exacto momento del solsticio y la segunda, dejar que mi intuición guíe el proceso.
Los planetas internos, Mercurio, Venus y Marte, son los que dictan la
pauta de los quehaceres de la vida diaria.
Los demás planetas son las influencias necesarias para convivir como la
humanidad que somos.
Este año comienza con una fortísima influencia del planeta Venus en el signo
de Escorpión, lo cual indica que el año
que se avecina verá una importante transformación en el tema de las relaciones
personales, ya sean de amistad, amor o familiar, tanto en términos positivos
como negativos tales como celos, posesividad, pasiones voraces, etc. Aunque estos términos estén siempre con nosotros, este año, en razón de que los demás
planetas aplacan su influencia para dejar que la fogosidad de Venus en
Escorpión prevalezca, esto trae como consecuencia que se corra el riesgo de perder lo que se
tiene, por no querer inclinar la balanza hacia el medio, hacia la
transformación.
La transformación a la que me refiero siempre es en primera
persona. Recuerden que el mundo de afuera refleja al mundo de adentro, y si lo de afuera no nos parece agradable,
pues a trabajar con nuestro mundo interior.
Quiero recalcar que no hay muchos términos medios este año, por lo que
nos toca tomar decisiones que nos mantenga en la meta a conseguir, sin meternos
en las honduras de sentimientos fuera de control. Todo está en manos del capitán de nuestra
barca. O nos hundimos en el mar de las
pasiones o llegamos al puerto seguro del
amor. Y me refiero a toda clase de
relaciones, no solamente las amorosas.
La persona que somos ahora, solo
puede cosechar lo que ha estado sembrando.
Para alcanzar los frutos superiores, hay que cambiar.
Simple y llanamente.
Tengo que advertirles que la influencia de Venus para este año también
busca desarraigar el árbol que no está
dando fruto, por lo que considero necesario meditar para decidir si lo que se
busca es comenzar de nuevo, o, -lo que
yo recomiendo-, darse una nueva oportunidad.
Cualquiera que sea la decisión, se asombrarán de la eficacia de la espada
bien afilada con la que la diosa del Amor viene armada para el 2016.
Este año, en el horóscopo chino, es el año del Mono Rojo de Metal, lo
cual quiere decir que prevalecerán las
situaciones audaces, atrevidas, juguetonas
y a la vez impredecibles. Tal cual un
mono brinca de rama en rama y se hace imposible de atrapar, así serán las energías
con las que se tendrá que trabajar.
Para este ritual, dedicado al amor, visualizaremos el deseo de nuestro
corazón.
No hay nada nuevo en visualizar creativamente. La fórmula es antigua y trabaja
impecablemente si lo hacemos en la forma debida. Visualizar creativamente no es solamente
imaginar. Es implicar a los dos aspectos
de nuestro cerebro y hacer que trabajen al unísono al mismo tiempo que nos
sumergimos en la imagen del deseo a tratar.
Importante: A la hora de visualizar, el propósito de la visualización debe estar
de antemano establecido. Como se trata
de lidiar con fuerzas abstractas dentro nuestro a las que vamos a tratar de
contactar, la imagen del resultado final debe estar fuertemente establecida en
nuestra imaginación. Si el propósito es
encontrar el amor, buscar una imagen que represente la idea, sin INVOLUCRAR A NINGUNA PERSONA CONOCIDA. Tratar de influenciar las esferas mentales
superiores con elementes de la esfera inferior no funciona, nunca. Se trata de llevar la imagen de lo que
creemos es el ideal de lo que buscamos.
Pongo como
ejemplo un matrimonio que no esté funcionando como se esperaba. La imagen que a mí se me ocurre es la
visualización de un día por día en donde la persona se sienta realizada, feliz, completa por si misma, sin
la intervención de su pareja. El solo
hecho de poner como prioridad la propia felicidad y entender que solo nosotros
podemos hacernos felices, será el catalizador para que nuestro mundo se arregle
como así lo deseamos. Luego debemos
recordar que debemos trabajar para mantener nuestro mundo feliz y para hacer
felices a los que nos rodean.
Luego del
ritual, trabajar con la prioridad número uno en nuestras vidas y visualizar la imagen
de lo que deseamos lograr.
Hacer
ejercicios de relajación y respiración antes de la visualización. Luego verse a si mismo, como si fuera una
película; la clave que hace toda la diferencia es involucrar los aspectos
mente-corazón. Hay que sentir la felicidad,
la alegría que nos provoca la imagen de conseguir lo deseado. Sin este sentimiento de felicidad, lo
visualizado se anula.
Los rituales del 21 de Diciembre son rituales de
Luz, fuego y calor, todos símbolos del Sol, que a su vez es el símbolo por
excelencia del Espíritu.
Los rituales
están compuestos de varios pasos.
1.- Deshacer
la negatividad del año corriente mediante el fuego.
2.-
Meditación-visualización guiada. Esto
tiene por objetivo pasar más allá de la mente consciente hacia el
subconsciente, que lo entiende todo a través
de la simbología.
3.- Oración
de recibimiento y agradecimiento de la Luz.
4.- Comunión.
Materiales a Utilizar este año 2015
Incienso
Una vela roja
grande
Una vela
blanca para cada participante
Un bol con
agua para colocar la vela roja.
Los pétalos
de una rosa roja colocados en el bol con agua.
Una cucharada
de sal
Una botella
de miel de abeja
Un recipiente
conteniendo una cucharadita de canela, una cucharadita de clavo molido,
Media cucharadita
de pimienta. Mezclar bien los ingredientes.
Colocar una cucharita en el recipiente.
Una rosa roja
para cada participante.
Escribir en
un papel las letras hebreas de AMOR. MEMORIZARLAS.
Una botella
de vino tinto
Una hogaza de
pan
Una
campana o un vaso de vidrio y una
cuchara para hacerlo sonar cuando llegue el momento.
Una moneda o
un billete para cada uno de los participantes. Este billete se guarda en la
caja y es nuestro imán para que no nos falte dinero en el año que viene.
Instrucciones:
Primer paso:
1.-Acomodar
la mesa colocando la vela roja en el
centro del bol con agua al que se le
habrá añadido una cucharada de sal.
2.-Escribir
lo negativo en papelitos fáciles de
quemar. Escribir lo que se desea lograr y colocarlo en una cajita. Aparte se escribe un deseo para
el mundo o nuestros semejantes.
3.- Prender una pequeña fogata afuera de la casa
o prender una vela para quemar lo negativo. Cada persona
quema sus papelitos, uno por uno
a la vez que va diciendo:
“Al fuego
purificador te entrego, ya he aprendido
la lección que viniste a enseñarme, vete
y no vuelvas a mi vida”.
Cuando el
papelito se queme se dice:
“Ahora te reemplazo con lo siguiente: en este momento se piensa en la situación
ideal que reemplazará la situación
negativa que nos estaba afectando”.
4.-Cuando
todos hayan quemado sus papeles, entran en la casa, se prende el incienso, se prende la vela roja solamente
5.- Cada
quien prende su vela de la vela roja y se colocan alrededor de la mesa, o donde
decidan sentarse. Cada quien coloca
enfrente su billete o moneda, su cajita
y su calendario en blanco.
6.- Uno por
uno, cada quien va a
decir, cuando le llegue su turno:
Este año que
se acaba ha sido para mí: (aquí cada
quien expresa lo que el año ha significado para él) A continuación dirá: Te doy las gracias por
las bendiciones y lecciones que has
traído a mi vida, ellas me han hecho una
mejor persona hoy. Ahora apaga su vela y
se mantiene en actitud meditativa en
silencio.
7.-Al final
solo estará la vela roja encendida.
El que dirige
la ceremonia ahora dice:
Demos gracias
a Dios por todas las bendiciones y experiencias que este año nos ha
traído. Ahora le dejamos ir en paz.
Apagar la
vela roja.
Ahora
estaremos en la oscuridad. Nos tomaremos de la mano para sentir la conexión que
nos une con la vida y el año que se acaba.
El que dirige
la sesión debe sonar la campana.
Segundo Paso
Visualización
Todos se
sientan en un círculo y se toman de las manos.
El que guía
la reunión toca la campanilla.
A continuación, el guía lee lo siguiente:
Cierren los
ojos.
Respiren
profundo y lentamente. (pausa)
Dejen salir
el aire lentamente. (pausa)
Respiren
profundo y lentamente. (pausa)
Dejen salir
el aire lentamente. (pausa)
Respiren
profundo y lentamente. (pausa)
Dejen salir
el aire lentamente. (pausa)
Respiren
profundo y lentamente. (pausa)
Dejen salir
el aire lentamente. (pausa)
Respiren
profundo y lentamente. (pausa)
Dejen salir
el aire lentamente. (pausa)
Sigan
respirando lentamente, al mismo ritmo (pausa)
Una tenue nube
de coloración rojiza comienza a formarse en nuestra imaginación. Nos envuelve con un calorcillo y nos hace
sentir bienvenidos.
La nube se
deshace poco a poco y nos damos cuenta de que
estamos de pie en una pequeña
habitación de paredes de madera olorosa.
En una
esquina un incensario deja salir volutas
de humo perfumado.
En la otra
esquina hay dos cajas cuadradas de
madera negra, una encima de la otra. Encima de las cajas, un cuenco de lapislázuli
sostiene la luz parpadeante de una vela.
Al fondo del
salón, dos columnas enormes enmarcan
tres puertas de madera talladas con jeroglíficos que en vano tratamos de
reconocer.
Recordamos
para qué hemos venido a este sagrado recinto y traemos al ojo de nuestra
imaginación el nombre en hebreo de la palabra AMOR.
Poco a poco
extraemos las letras de nuestra mente, las vamos agrandando y las colocamos frente a nosotros,
flotando frente a las tres puertas. Ahora tienen un agradable brillo dorado.
La puerta a
la derecha se va abriendo poco a poco.
Un vientecillo fresco aromatizado entra en el recinto envolviéndonos con su
frescor de cerezos en flor. El viento se
retrae y con él las letras hebreas se van deslizando hacia la oscuridad detrás
de la puerta.
Seguimos las
letras y nos adentramos en la oscuridad.
Una gran
esfera luminosa de un color verde dorado comienza a formarse ante nuestros
ojos.
Nos acercamos
a ella y nos atrae, así como el vientecillo atrajo las letras.
Ahora nos
encontramos dentro de la esfera verde y comenzamos a ascender en medio de la
oscuridad.
Subimos y
subimos y nos olvidamos del tiempo.
La esfera se
detiene y salimos de ella, atravesando la fina cortina de rocío que la compone.
Nos encontramos
en un hermoso jardín, lleno de exóticas y perfumadas flores.
Caminamos por el jardín
y encontramos un sendero de pequeños ladrillos dorados.
Lo
seguimos y atravesamos un frondoso
bosque de cedros hasta llegar a un claro.
La hierba es
de un verde brillante y se siente fina a nuestros pies desnudos.
Al fondo del
claro, hay un hermoso pabellón de columnas llenas de rosas trepadoras.
En el centro
del pabellón, detrás de finas cortinas de seda, bordada de rosas, está una
hermosa mujer de largos y rizados cabellos rubios.
Está sentada
en un trono de oro y piedras preciosas.
Aunque no
podemos vislumbrar sus facciones, nos damos cuenta de que viste una larga
túnica y lleva sobre sus sienes una corona de doce estrellas doradas.
Nos detenemos
sin aliento ante tanta belleza.
Nos dejamos
envolver por sensaciones evocadoras y sabemos que estamos ante una presencia imposible de definir pero
que apela a nuestras más profundas
emociones.
Un vaporcillo
verde se levanta de la hierba y las letras hebreas comienzan a conformarse
nuevamente frente a la silueta admirada.
Detrás de las
cortinas vemos a la figura moverse hacia una de las columnas y extender su mano
como para tomar algo.
Una mano de
alabastro se asoma a través de las cortinas y nos hace un gesto para que nos
acerquemos.
Nos acercamos
temerosos y llenos de gran excitación.
El perfume
que nos envuelve nos aligera el paso.
La mano
desaparece detrás de las cortinas para aparecer nuevamente portando la más
hermosa rosa que hayamos visto.
Tomamos la
rosa sin atrevernos a levantar la mirada ante tanta majestad.
Las letras
hebreas vuelven a desintegrarse y caen como rocío sobre la rosa.
El
entendimiento brilla en nuestra mente y nuestro corazón.
Sabemos que
tenemos un trabajo que hacer, pero también sabemos que el recuerdo de este
momento nos ayudará a lograr nuestra meta.
Nos retiramos
hacia atrás sin dar la espalda, hasta que llegamos al borde del bosque.
Nos volteamos
y con pesar en el corazón por tener que abandonar este sagrado lugar, caminamos
hacia el jardín donde la esfera de rocío nos espera.
Nos
adentramos en la esfera y pronto estamos de vuelta a la puerta del recinto donde
comenzara nuestro viaje.
El olor del
incienso y la luz de la vela nos dan la bienvenida.
Cerramos los
ojos.
Contamos
hasta tres y volvemos a nuestra realidad.
Tercer Paso
Ahora el que guía la reunión toca la campanita otra vez, y dice:
En verdad, en verdad, pasamos por la vida sin notar las grandes
bendiciones que Dios nos otorga diariamente. Mas hoy nuestros ojos han sido
abiertos y por eso Alabamos a Dios desde lo más profundo de nuestro ser, le
agradecemos sus múltiples bendiciones, en especial este nuevo año, esta nueva
cosecha, donde veremos culminados muchos de nuestros deseos. El tiempo de la
cosecha ha llegado. Alabado sea el Dios que habita dentro de nosotros.
Todos repiten: Alabado sea.
Cuarto Paso
ENCIENDE LA VELA ROJA Y toca la campana cada vez que cada uno va
encendiendo su vela en el fuego de la vela roja .
Todos repiten:
El espíritu de la Navidad ha llegado y hoy llena de alegría nuestros
corazones.
Bendita sea esta luz que Dios nos envía hoy y que viene a llenar mi vida
con la abundancia y el amor divino. En este día yo le agradezco a Dios de
antemano por abrirme las puertas de la prosperidad y la abundancia del Universo
y por concederme bajo la gracia y de manera perfecta todas las peticiones que
contienen mi cajita.
Especialmente le pido lo siguiente: (aquí va a leer en voz alta la petición que tiene escrita para el mundo
o para su comunidad, etc. )
Ahora que todos tienen sus velas encendidas y han leído sus peticiones
globales, el que dirige la ceremonia dice lo siguiente:
Yo soy el Hijo de Dios, creado a su Imagen y Semejanza. Para mí fueron
creados los cielos y la tierra. Por derecho divino me pertenecen todos los
tesoros del Universo.
Dios me ama y solo quiere lo mejor para mi, por lo tanto yo soy
merecedor de toda la prosperidad y abundancia del Universo, la cual llega a mis
manos en la medida en que estoy dispuesto a disfrutarla. Hoy he abierto una de
las muchas puertas de la prosperidad dentro de mí y hoy me hago merecedor de
recibir todo este caudal de energía que me impulsara al sitio donde
verdaderamente debo estar. Hoy todo obstáculo mental que me he creado y el cual
estaba impidiendo que la abundancia de dios llegara a mi vida ha sido
destruido. Hoy soy una persona renovada en este rayo de energía. Hoy he
recibido un regalo que me ayudara a descubrirme a mí misma, a abrir mi alma a
las verdades del Ser. Que mi petición y la
de todos los que conmigo peticionan nos sea concedida, bajo la gracia, de
manera perfecta. Gracias Padre, por tus infinitas bondades. Amén
Ahora pueden abrir la botella de vino, y hacer un brindis y comer de la hogaza de
pan.
Nota: Antes del brindis, cada quien puede tomar una
pizca de las especies y un poquito de miel y echarlo en su copa de vino. Lo que
resta repartirlo para usar cuando y para lo que crean más conveniente. Dejarse llevar por la intuición.
Colocar los pétalos de
la rosa en un licor de fruta o el licor que prefieran, agregar una pizca de las
especies, guardar en un lugar seco y
tomar para ocasiones “especiales”, junto con una cucharadita de la miel.
Feliz Navidad y un Próspero y Venturoso Año Nuevo 2016
Canelo